Recaudación de fondos por Silvio Lorenzi

Aquí estamos de nuevo: aunque lejos, seguimos caminando juntos.

Hasta hace algún tiempo nunca hubiera imaginado que la discapacidad hubiera dado un vuelco (en sentido positivo) a mi forma de ver y vivir la vida. Pero, como bien sabemos, el buen Dios nos tiene reservadas grandes sorpresas y grandes sueños.

El primer hijo que acogimos en nuestra familia fue un niño que, con su discapacidad, nos enseñó a ver la vida desde otro punto de vista. Y no sólo eso. Comparto mi vida cotidiana en un centro de día frecuentado por personas con discapacidades físicas y psíquicas: he descubierto que estar cerca de quienes son frágiles me ayuda a crecer centrándome en el ser más que en el tener, y a descubrir la belleza de compartir.

Cada día comprendo más que para mí la sociedad no debe dejar atrás a los que van más lentos, sino que debe asumir como propio el ritmo de los más frágiles.

Apoyar el proyecto de la Cooperativa Sociale San Damiano significa garantizar a las familias necesitadas la posibilidad de entrar en contacto con personas y lugares acogedores y adecuados a las necesidades de los más frágiles.

Por todo ello, os pido a todos que hagáis un pequeño gesto de amor esta Navidad: regalemos un ladrillo a mis amigos de Cerdeña para su Centro de Día, que quiere hacerse más grande para tener los espacios adecuados para iniciar caminos de formación y trabajo para los muchos jóvenes que acoge.

Gracias,

Silvio