Una pequeña señal para dos grandes corazones
Recaudación de fondos por Primo Lazzari
"Nunca pensé que cambiaría el mundo. Sólo intenté ser una gota de agua limpia. Si tú también te conviertes en una gota de agua limpia, ya seremos dos. Y si tu mujer o tu marido también lo son, seremos tres, y luego cuatro, diez, cien", respondió la Madre Teresa de Calcuta, durante la rueda de prensa en Oslo para la entrega del Premio Nobel de la Paz en 1979, a un periodista que le preguntó si pretendía cambiar el mundo.
Mario y Raffaella son dos gotas de agua limpia que se han tomado en serio esta invitación, haciendo más bello este mundo nuestro.
También hacen creíble lo que dice don Oreste: "El sueño de uno se queda en sueño, el sueño de muchos se hace realidad". Su casa familiar es un signo de la ternura y la misericordia del Señor, que se manifiesta en la sencillez y la turbulencia de la vida cotidiana.
Tengo ganas de invitaros adar las gracias, conmigo, a Mario y Raffaella por la belleza de su matrimonio que se refleja en los rostros de tantos hijos e hijas generados por su amor y su compartir.
Me apetece invitartea apoyar el compromiso de adquirir una nueva furgoneta que sirva a su hogar familiar para anunciar la alegría de compartir.
Gracias por lo que va a donar.